En la actualidad, el bienestar psicológico ha adquirido una relevancia equiparable a las compensaciones económicas en el entorno laboral. Incluso han surgido nuevas regulaciones como la normativa NOM-035, diseñada para promover y preservar la salud mental en el trabajo. Explora en nuestro artículo la trascendencia de este enfoque.

 

El entorno laboral se ha convertido en un segundo hogar, absorbiendo la mayor parte de nuestras jornadas diarias.

A pesar de esto, a menudo se convierte en un generador de estrés y agotamiento,

llevándonos a cuestionar si estamos en el camino correcto.

Imagina la posibilidad de sentirte igual de cómodo en tu lugar de trabajo como en tu
propio hogar. La idea de un ambiente laboral libre de estrés y un hogar no solo destinado
al descanso sería verdaderamente enriquecedora.

 

Cada vez más, se observa una creciente atención hacia el bienestar mental en el ámbito

laboral, con regulaciones más rigurosas y empresas que buscan crear ambientes de
trabajo que promuevan el bienestar emocional de los colaboradores. Incluso la
Organización Mundial de la Salud (OMS) ha reconocido oficialmente el agotamiento
profesional, o burnout, como una enfermedad laboral.

 

¿Qué Define la Salud Mental Según la OMS?

La salud mental se refiere a un estado de bienestar completo que abarca lo físico, lo
mental y lo social, y no se limita simplemente a la ausencia de enfermedades. Esto implica
que para lograr la salud mental, se deben atender aspectos físicos, como una dieta
saludable y el ejercicio regular, así como factores sociales, como un entorno laboral
positivo.
Implementando Programas de Salud Mental en las Empresas
La implementación efectiva de tales programas requiere considerar los tres elementos
mencionados previamente, permitiendo la creación de un plan integral que abarque:

1. Salud Física: El movimiento es esencial para la vida. Aunque las preferencias
varíen, la actividad física diaria beneficia a todos. Las empresas deberían
considerar la inclusión del ejercicio en beneficio de sus empleados.
2. Salud Mental: Cada individuo aborda el estrés, la productividad y las interacciones
de manera única. Tomar en cuenta aspectos como la experiencia del empleado y la
adaptación a la empresa es crucial.
3. Salud Social: Reconociendo que nadie opera en aislamiento, el fomento de
relaciones saludables en el entorno laboral es esencial. Cultivar una cultura
organizacional positiva se logra mediante estrategias centradas en los empleados.

Una vez que el empleador engloba estos tres aspectos, es su responsabilidad comunicar
eficazmente las herramientas disponibles para los empleados y asegurarse de que las
utilicen. Además, los colaboradores deben comprender que es su deber aprovechar estas
oportunidades y comprometerse con ellas para que los programas de salud mental sean
efectivos.

Importancia Capital de la Salud Mental en el Trabajo

Cada individuo es un ser complejo, con emociones, aspiraciones, pensamientos y deseos
propios, influidos por su entorno y habilidades. La salud mental en el trabajo no solo
afecta a la empresa, sino que también puede tener un impacto severo en la salud del
colaborador. Una salud mental sólida conlleva empleados más motivados, comprometidos
y creativos, lo que se traduce en un ambiente laboral positivo y resultados sobresalientes.

Factores que Influyen en la Salud Mental en el Entorno Laboral

Existen tres elementos clave que influyen, ilustrados mediante ejemplos laborales:

1. Aspectos Sociales: La forma en que los empleados se comunican, cómo se apoyan
mutuamente y cómo enfrentan desafíos como equipo.
2. Factores Psicológicos: La presión financiera puede llevar a los empleados a
experimentar estrés.
3. Factores Biológicos: Las condiciones médicas, como el trastorno afectivo bipolar,
pueden afectar el bienestar mental.
Las empresas deben comprender que la salud mental no se reduce a la felicidad; es un
asunto complejo que requiere una aproximación holística.

Mejorando la Salud Mental en el Trabajo

Transformando la percepción de los empleados a través de acciones que consideren su
bienestar físico, social y mental. Un ejemplo es el caso de Raúl, quien al contar con
beneficios como vales de despensa y gasolina, siente menos estrés por su situación
financiera. Su compromiso con la empresa y su reconocimiento como un activo vital
también contribuyen a su satisfacción laboral y tranquilidad económica.

Este ejemplo resalta cómo una estrategia completa aborda los diversos aspectos
mencionados, generando un entorno donde los empleados se sienten valorados y felices,
lo que a su vez promueve la productividad.

Evolución en la Percepción Empresarial de la Salud Mental

En la actualidad, las empresas son más conscientes de la importancia de la salud mental
en el trabajo. En décadas pasadas, esta preocupación era menos común, y los empleados
a menudo eran considerados como cumplidores de tareas en lugar de individuos con
necesidades y aspiraciones. Afortunadamente, cada vez más empresas implementan
programas de salud mental, no solo para aumentar la productividad, sino también para
lograr resultados sostenibles y expandibles.